¿Famoso yo?

"... mi sangre aunque plebeya también tiñe de rojo..."

Hoy al subir al bus que debo tomar para ir al trabajo, una chica - valga decirlo, simpática - quedó mirándome. Miraba mi forma de vestir, mis accesorios - léase teléfono celular - y mis "movimientos" - por la canción que escuchaba y mis emulaciones a lo John5 ó Twiggy Ramírez.



Al darme cuenta de ello me puse a pensar si todo esto de jugar al "escritor" rindiera frutos y sea famoso. Claro que me costaría porque no soporto la presión de la gente - en el sentido que soy asmático y siempre me ahogo.



Recuerdo, con todo ello, la primera vez que di un "autógrafo" - creánme, lo hice - fue en Huaraz durante un evento cultural el cual, al lado de un amigo en la guitarra, me puse a declamar 4 poemas más o menos pulidos.



Aquella noche, un chico - con una expresión de ser el protagonista del relato - salto de emoción y dijo bravo mientras alrededor todos miraban al escenario. Al salir, dos chicas me pidieron mis hojas - mis plages, pues no suelo recordar lo que escribo - y pidieron quedarse con ellos. De ellas no sé más nada.



Aunque pensandolo bien, ser famoso no me llama la atención - aún cuando mi egocentrismo diga que sí - debido a que no soportaría dormir en el bus, andar ebrio por las calles o simplemente conversar con una amiga en algún parque.



No niego que me se marca una notoria sonrisa en mi rostro cada vez que veo un nuevo comentario en mi(s) blog(s) y que unos digan que en verdad soy un poeta - cuando en realidad no me siento aún así - pero, hay que seguir nada más y soportar lo que venga ahora en adelante - así sea con mis 5 lectores.